LIBRERÍA SAN GINÉS
Pasadizo de San Ginés, 2
28013 Madrid
teléfono… 913 66 46 86
El
pasadizo de San Ginés va de la calle del Arenal
hasta la plaza de San Ginés.
hasta la plaza de San Ginés.
Un pasadizo corto, 60 metros más o menos,
pero sabroso.
pero sabroso.
En la esquina de la Calle Arenal con la Iglesia de San Ginés
y enfrente del Joy Eslava está ¡ella! , una librería de paso.
Consiste en dos librerías alargadas protegidas por persianas, y una minicasita de madera
que sirve de almacén y refugio del librero.
que sirve de almacén y refugio del librero.
En 1805 los periódicos de la época ya hablaban de ella,
así que se le supone más antigüedad.
así que se le supone más antigüedad.
Harold siempre se para a mirar y a oler.
Aunque un bon vivant como él no se si echa
de menos la lectura o los bailes
y el alcohol con la perra de turno.
Todos los días el mismo ritual. Luís Fernández o/con su hija Alicia, abren la casita, suben las persianas que dejan
al aire las librerías repletas de libros antiguos
y de ocasión. Para el resto sacan los caballetes,
las maderas , separan y colocan los libros
previamente seleccionados y los van
colocando con mimo y precisión.
Por contenido (éste es mi santo),
antigüedad,
si pertenecen a colecciónes
o por precio.
Siempre hay algún libro que apetece por algún motivo.
Y si encuentras unos cuantos chollos
¡cómpralos! que te los llevan a casa.
Para variar puedes también encontrar alguna reproducción del Madrid antiguo o estampaciones varias.
En una calle ruidosa y llena de comercios y en éste entrañable y acogedor mini espacio, permítete unos minutos de reflexión. Estos libros son las historias que te detienen y te brindan un encuentro con un santo o un canalla, con la historia o con la actualidad, cosas curiosas, ensayos, novela, biografías, poemas… así podrás decir como Raúl Alcover… Y confieso con Neruda que he vivido
Raúl Alcover... poetas
Raúl Alcover... poetas
Yo te amaba con los versos de Cernuda
Naufragaba con Alberti marinero
Góngora siempre me llenó de dudas
Y era libre con las rimas de Quevedo
No sabría recitarte a Baudelaire
Pero queda bien decir que lo he leído
Me empalaga tanta azúcar en Rubén
Y confieso con Neruda que he vivido
Desnudé con Federico algún poema
Y con Bequer eras tú la poesía
Descubrí con Machado a Juan Mairena
Y Alfonsina fue el amor que siempre huía
No recuerdo ni un soneto de Rimbaud
Pero queda bien decir que lo he leído
Soy del sur que se declara en Juan Ramón
Y confieso con Javier que he bebido
Hernández, Celaya, Otero, Octavio Paz
Me llenaron de palabras y esperanzas
Calderón, Lope de Vega, Rosalía
Con Gloria Fuertes regresé a la infancia
Nuestras vidas son los ríos que van al mar
Siempre estuve de acuerdo con Manrique
Alexandre era bueno y de legal
Desperté en un cuento de León Felipe
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