Tabucchi y la mortadela de chocolate, sostiene Pereira
Con este fado de Morricone a brisa do coraçao, Dulce Pontes nos lleva a la Lisboa de Sostiene Pereira, un periodista en el verano de 1938 bajo la dictadura de Salazar...
...Y Pereira era católico, o al menos en aquel momento se sentía católico, un buen católico, pero en una cosa no conseguía creer, en la resurrección de la carne. En el alma, sí, claro, porque estaba seguro de poseer un alma, pero toda su carne, aquella chicha que circundaba su alma, pues bien, eso no, eso no volvería a renacer, y además ¿para qué?, se preguntaba Pereira. Todo aquel sebo que le acompañaba cotidianamente, el sudor, el jadeo al subir las escaleras, ¿para qué iban a renacer? No, no quería nada de aquello en la otra vida, para toda la eternidad, Pereira, y no quería creer en la resurrección de la carne...
Tampoco querría esta MORTADELA DE CHOCOLATE porque
nunca como dulces, no me gustan, sólo bebo limonadas, sostiene Pereira. Pero seguro al escritor italoportugues llamado Antonio Tabucchi le encantaría.
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inés baucells
Podría degustarla en el café Orquídea mientras yo tomo mi omelette a las finas hiervas, sostiene Pereira. A mi mujer le encantaba hacerla y a mi ver cómo la hacía... mientras, recordaba sitios, personas, mascullaba conversaciones, hechos...
...
La filosofía parece ocuparse sólo de la verdad, pero quizá no diga más que fantasías, y la literatura parece ocuparse sólo de fantasías, pero quizá diga la verdad... sostiene Pereira
con... 1 tableta de chocolate fondant ,
150 gr. de avellanas, 50 de piñones,
150 gr. mantequilla,
100 gr. azúcar,
300 gr. de galletas maría o Digestive de naranja..., naranjines = naranja glaseada y picadita muy fina al gusto, 2 huevos, chocolate picado o perlitas de sabores o lo que más te guste y
su poquito de cointreau o licor de naranja sin alcohol... se hace la mortadela de chocolate
Tal vez pueda hacerse todo, basta con tener voluntad para ello... sostiene Pereira
¿cómo? Ponemos
la mantequilla y el chocolate a derretir en el microondas. Cuando la mantequilla está derretida se saca y con una lengua se mezcla y termina de deshacer el chocolate
el evento es un acontecimiento concreto que se verifica en nuestra vida y que trastoca o perturba nuestras convicciones o nuestro equilibrio, en fin, el evento es un hecho que se produce en la vida real y que influye en la vida psíquica, usted debería reflexionar sobre si en su vida ha ocurrido algún evento... sostiene Pereira
Las galletas se meten en una bolsa de plástico y se les pasas varias veces el rodillo, tarro/vaso hasta que queden desmenuzadas. Con las avellanas se hace lo mismo pero sólo se rompen un poco
Batimos las claras a punto de nieve y reservamos. Batimos las yemas con el azúcar hasta que queda una pomada. Le añadimos el fundido de mantequilla y chocolate más el cointreau y batimos un poco más. A la mezcla le añadimos las galletas, la naranja picadita, los piñones enteros, y para finalizar mezclamos todo con las claras a punto de nieve, con movimiento envolvente para que no pierdan el aire...
Una vez todo bien mezclado echamos la masa sobre un film transparente
rebozamos
y cortamos con un cuchillo bien afilado en láminas muy finas.
Delicatesen
¿todo bien?
El arrepentimiento es algo en lo que todos deberíamos pensar... sostiene Pereira
La muerte, el alma, la resurrección de la carne, el recuerdo de su esposa muerta, su cotidianidad periodística, la literatura francesa, las limonadas, un Portugal convulso pero en el que vive tranquilo y por el que cree que no puede hacer nada para cambiarlo... son las preocupaciones del viejo periodista Pereira.
El encuentro con el joven Monteiro Rossi y su novia Marta, símbolo de juventud, conciencia, aventura, riesgo, inconformismo, lucha... da un cambio radical a su vida. El Dr. Cardoso a quién le cuenta sus inquietudes, también le cuida por dentro y por fuera y entre todos consiguen que por primera vez y casi inconscientemente, pero con el beneplácito de su conciencia empiece a hacer y decir cosas que le sacan de la mirada retrospectiva y conformista que le invade.
vive inmerso en la comodidad, en el silencio impuesto por el poder, el dinero, la autocensura, el periodismo al dictado, la mordaza a la prensa... Querido Monteiro Rossi, permítame que sea franco con usted, su artículo es impublicable, totalmente impublicable. No es que yo no pueda publicarlo, es que ningún periódico portugués podría publicarlo, y tampoco ningún periódico italiano, visto que Italia es su país de origen; hay dos posibilidades: o es usted un inconsciente o es usted un provocador, y el periodismo que se hace hoy en día en Portugal no prevé ni inconscientes ni provocadores, y eso es todo... pero Pereira cae en un debate moral, sostiene... y al final nace el periodista que ejerce por primera vez en conciencia, denunciando, libre...
Roberto Faenza en 1996 da vida a Pereira en Marcelo Mastroianni. Una película que hay que ver...
...sin embargo sentía una gran nostalgia, de qué no podría decirlo, pero
era una gran nostalgia de una vida pasada y de una vida futura,
sostiene Pereira...
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